Con ella se pretende ofrecer todas las facilidades a los ciudadanos para que el reciclaje no sea un problema y que se acostumbren a no tirar toda la basura en un mismo lugar. De esta manera se pretende concienciar al pueblo de la importancia del reciclaje en la actualidad.
Así, en el Ajuntament hay una educadora medioambiental que se encarga de repartir los kits de reciclaje a los vecinos, así como también les ayuda a entender el funcionamiento de la campaña. Según ha explicado a este periódico: «cada día viene gente con preguntas. Los residentes se han implicado mucho y, aunque cuesta un poco, se esfuerzan muchísimo para hacerlo lo mejor posible. La campaña también va dirigida a los grandes productores».
Además de repartir el kit, el Ajuntament se ha encargado de llamar casa por casa para informar de la campaña y pedir cuantos contenedores se necesitan por persona, con el objetivo de que no falte ninguna facilidad a los vecinos.
La campaña ha durado un mes, aunque la educadora medioambiental no duda a la hora de decir que «una sola educadora para tantos municipios no basta, porque se trata de un cambio importante para la población y se debería contar con más tiempo y más recursos humanos.
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