Increíble. Ésta es la expresión más oída en Campos, cuando Baltasar Rigo Vanrell, de Son Blanc, cuenta que en su finca de Son Pinya tiene un verraco que amamanta a cuatro cerditos. Hace dos meses que cuatro crías viven del alimento que les proporciona este cerdo.
El propietario de esta explotación ramadera asegura que a sus 53 años nunca había visto una cosa parecida: «Mi bisabuelo, mi abuelo y mi padre siempre han trabajado en el campo y siempre ha habido animales en casa y yo no recuerdo un hecho como éste. Baltasar compró hace unos años cuatro verracos y uno de ellos no ha crecido ni se ha desarrollado como los demás. Según Baltasar: «La sorpresa fue ver que sus pezones se alargaban y se desarrollaban como los de las hembras y, de hecho, hace dos meses que está amamantando las cuatro crías».
Baltasar es un experto en ganadería, ya que en su explotación ganadera SAT Campanera, distribuida por diversas fincas, cuenta con más de 4.000 animales: ovejas, cerdos, vacas y bueyes.
Resulta extraño ver cómo un verraco, con los mismos gemidos de una hembra, amamanta a cuatro crías. Él se coloca y los cuatro cerditos buscan los pezones.
Baltasar asegura que ha quedado más reducido que los demás y con más barriga: «Ahora tendremos que ver cómo evoluciona después de amamantarlos», comenta.
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