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Dos vecinos de Muro han sido condenados a 45 días de multa a razón de 4 euros diarios por una falta de lesiones tipificada en el artículo 617 del Código Penal tras haber golpeado el pasado 5 de mayo al rector de Muro, Pere Fiol.

En el juicio celebrado ayer, los vecinos reconocieron haber golpeado al rector porque aseguran que éste había abofeteado, previamente, a su nieto de cuatro años tras amonestarle por haberse llevado unas flores de la iglesia. La jueza recriminó a los vecinos (el novio de la abuela del menor y su hijo) por haberse tomado la justicia por su mano en lugar de presentar denuncia y les condenó a una multa de 45 días cada uno. Los condenados no presentarán recurso tras haber reconocido los hechos.

Por su parte, el rector de Muro, Pere Fiol, ha renunciado a cualquier indemnización económica por las lesiones sufridas. Pere Fiol siempre negó haber abofeteado al menor. Mantiene que le recriminó en presencia de su abuela por ensuciar la iglesia y llevarse flores, pero que no le golpeó en ningún momento.

Tras ser golpeado por los familiares del niño el 5 de mayo de 2007 (4 días después del incidente con el menor), el sacerdote no quiso presentar denuncia pero un policía local que se percató de los hechos informó al juzgado de oficio y, por eso, ayer se celebró el juicio en el que declararon el policía, el sacerdote y los agresores.

La agresión se produjo en la iglesia parroquial cuando el sacerdote regresaba de oficiar un casamiento en Felanitx.