La presencia de una réplica del famoso mural d'en Frau que rechazó Manacor y cuyo original está en el Bosc de la Memòria de Calvià, y un más que considerable aumento de participación, marcaron el homenaje a los republicanos fusilados que organiza el PSM.
El de este año puede ser el último acto que organiza el partido nacionalista puesto que a petición del Bloc (PSM, Esquerra y EU-EV), se ha creado una comisión en el pueblo para que el acto sea organizado por el Ajuntament «por el valor democrático que supone que sea un acto institucional», apuntó la regidora del partido, Joana Mora.
Tras la explicación de la moción aprobada por el pleno municipal que también supondrá embellecer la parte posterior de la Creu donde se ejecutaron a unas 300 personas en 1936, el editor e historiador Albert Herranz realizó la lectura central. Repasó los logros de la República para mejorar la calidad de vida de las personas. Habló también del «silencio y el miedo» que instauró el golpe de Estado del 36 y concluyó recordando «a los olvidados, a los que no tienen a nadie que les recuerde».
Tras la intervención de los historiadores Tomeu Garí y Simó Tortella, se realizó una ofrenda floral. La música de las xeremies cerró el homenaje.
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