La lluvia obliga a suspender las esperadas ferias de Puigpunyent y Biniali

M. MEDRANO/A. BETTI La lluvia dejó ayer sin feria a las localidades de Puigpunyent y Biniali. En Puigpunyent, los actos de la Fira Ecològica, Pagesa i Artesana quedaron aplazados hasta el próximo sábado. La constante lluvia de la mañana impidió que se montaran los diferentes puestos previstos en las calles más céntricas de la localidad y, finalmente, se decidió suspender los actos de la previsto como el concurso de cortar troncos. Sí se mantuvo el programa de la ruta gastronómica en los restaurantes La Rosa, La Vila y Can Domingo. En el núcleo senceller de Biniali se suspendieron todos los actos previstos para celebrar la primera feria de su historia, dedicada a los juegos populares. Sólo las exposiciones de pintura de Ca ses Monges concentraron a los vecinos, que aplaudieron el esfuerzo del alcalde, Miquel Fiol, que descartó ayer aplazar la feria una semana, tal como se barajó inicialmente. «Tenemos más de 900 peonzas preparadas, unas 9.000 canicas, 250 aros y un montón de cometas que ahora o bien tendremos que regalar o guardar para el año que viene», lamentaba. Josep Bestard y Miquel Feliu, los ideólogos de esta feria, estaban ayer desconsolados. Los dos xeremiers, llegados de Santa Eugènia y Montuïri, no pudieron tocar por las calles.