El juzgado Contencioso Administrativo número 1 de Palma ha denegado la suspensión cautelar del acuerdo del pleno de 20 de septiembre de 2007 que revocaba la concesión del suministro de agua potable a Costera d'Aigues i Serveis y la adjudicaba a Aigües Son Sard.
La empresa recurrente, Costera d'Aigües i Serveis, entendía que este acuerdo era nulo de pleno derecho, pero sus argumentos no han sido admitidos. La juez considera que no se puede acordar la suspensión, ya que dejaría en suspenso una concesión en marcha «y que ello supondría un trastorno importante para los intereses generales y para las necesidades de la población». Contra este auto, cabe interponer un recurso de reposición.
El alcalde Josep Barrientos hizo una valoración positiva. «Esta resolución demuestra que en ningún momento el equipo de gobierno actuó de mala fe con el cambio de concesión. Siempre hemos defendido los intereses del pueblo y nunca los intereses privados. Estas decisiones nunca se toman a la ligera sino que estaban bien informadas por profesionales en recursos hídricos».
Hay que recordar que el equipo de gobierno anterior, PP-UM, otorgó una semana antes de las elecciones la concesión por un periodo de 25 años a la empresa Costera d'Aigües i Serveis. El PP interpuso un recurso contra el cambio de concesión.
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