El parque de bomberos de Calvià está ubicado a la entrada de Santa Ponça.

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En la actualidad, el montante de la deuda asciende exactamente a 3.768.980, 97 euros, correspondiente a los últimos años desde 2003.

El Ajuntament de Calvià dejó de pagar el servicio de bomberos cuando el 1 por ciento de su presupuesto suponía una cantidad desproporcionada en relación a otros municipios. Calvià con el presupuesto municipal más alto de los ayuntamientos de la Part Forana, aportaba bastante más que otras localidad. Esto provocó que ya el equipo municipal de la socialista Margarita Nájera dejara de pagar.

Durante años, desde el Consell se ha trabajado en normalizar la situación sin conseguirlo. En 2000, el conseller insular Antoni Pascual logró un acuerdo con el Consistorio de Calvià para la modificación del convenio en materia de prevención y extinción de incendios. El acuerdo contemplaba el pago a partes iguales del mantenimiento del parque. Se llegó a un consenso, pero la deuda se mantiene, según explica Miquel Angel Sureda, director insular de Emergències.

En estos momentos, tanto la aportación del 1 por ciento como el pago de un 50 por ciento alcanzan cifras similares, por lo que no hay motivo para no pagar. No obstante, no le corresponde a Interior negociar la deuda sino al Departament d'Hisenda. Por la parte que le ataña, el director insular d'Emergències asegura que Calvià no se quedará desatendido por el impago de la deuda. «Independientemente de si una administración paga o no, los bomberos han de actuar en caso de emergencia; es un servicio que puede afectar a los residentes, visitantes, empresarios. Calvià está atendido y seguirá atendido», señala Sureda, quien a renglón seguido apunta que «si ha y acuerdos firmados se han de respetar».

En 2003, la deuda del Ajuntament calvinaner era de un millón de euros; en 2004, de 1,4 millones; en 2005, de 1,6 millones; en 2006, de 1,7 millones y el año pasado, también de 1,7.

El próximo año se cumplen ya 25 años desde que se creó este servicio para actuar en el ámbito de la Isla. El parque de bomberos de Calvià es de los más activos de la Isla y además en un «momento dado siempre puede contar con apoyo de otros parques», puntualiza Miguel Àngel Sureda, quien insiste en que «es importante que se satisfagan estas cantidades para no repercutir en el ciudadano».

«El servicio en materia de prevención y riesgo de incendio es costoso y de cara al año que viene necesitamos mejorar el presupuesto, ya por supervivencia del propio cuerpo. Las necesidades de mejora de instalaciones son inminentes», mantiene.

Otros ayuntamientos también han demorado en alguna ocasión los pagos al organismo insular, pero en ningún caso las cantidades adeudadas han sido tan elevadas como en Calvià.