Las obras de la Trapa se paralizaron en 2003 y desde entonces no se ha trabajado en la recuperación de las casas.

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Por fin hay fecha para la reanudación de las obras de las casas de La Trapa. El Departament de Medi Ambient i Natura del Consell de Mallorca ha decidido sacar a concurso las obras el próximo año 2009. Si bien, hasta ahora, las brigadas de margers del organismo se habían encargado del llevar a cabo este tipo de obras en las edificaciones públicas, para ejecutar las de La Trapa, ha decidido adjudicarla a una empresa externa, según anuncia Francesc Cladera, director insular de Medi Ambient i Natura.

Para hacer realidad el proyecto, Medi Ambient i Natura destinará, si le aprueban el presupuesto, 1,5 millones de euros. Francesc Cladera explica que para las brigadas del organismo insular es difícil realizar estas obras «por la falta de maquinaria». Los traslados de material son complicados por el difícil acceso a La Trapa, lo que entorpece considerablemente el proyecto.

Una vez comenzadas las obras, podrán estar concluidas en un año y medio aproximadamente. Así, será en 2011 cuando la obra quedará incorporada a la red de albergues de la Ruta de Pedra en Sec. La institución insular lo gestionará durante 32 años, según el convenio de colaboración suscrito el año pasado para la cesión de la casas de La Trapa.

La restauración de las casas de La Trapa se inició en 2001. Durante unos dos años, una «escola-taller de margers» del Consell trabajó activamente en las obras. Pero después, las obras se fueron ralentizando hasta que en 2003 se paralizaron por completo. Desde entonces, hace ya cinco años, no se ha realizado ningún trabajo allí, salvo el que desarrollan cada verano los campos de voluntarios en el entorno de las casas.

De esta manera, La Trapa será el último refugio en ponerse en marcha de la Ruta de Pedra en Sec, proyecto que prevé enlazar Andratx y Pollença, toda la Serra de Tramuntana, a través de antiguos caminos y una red de albergues. En estos momentos, ya funcionan los refugios de Can Boi, Muleta, Tossals Verds, Son Amer y Pont Romà.

En el caso de La Trapa, propiedad del GOB desde 1981, la organización conservacionista se hará cargo de la gestión del medio natural y de las zonas agrícolas de la finca y colaborará en el buen funcionamiento del refugio, así como en la conservación de los elementos arquitectónicos.