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Los alcaldes des Pla de Mallorca quisieron exponer ayer al president del Govern, Francesc Antich, los serios problemas de financiación que padecen los ayuntamientos de esta comarca. Antich ha convocado en las últimas semanas a diversos sectores para analizar la delicada situación económica de las Islas, aunque en esta ocasión el encuentro se celebró a iniciativa de la Mancomunitat des Pla, que congrega a 14 municipios del interior.

Los ediles reivindicaron desenterrar el 'Pla des Pla', un proyecto ideado hace al menos tres legislaturas para reactivar la comarca y que nunca se llevó a cabo. Antich conoce bien este proyecto. Él era alcalde de Algaida cuando comenzó a gestarse.

El plan quedó aparcado en su momento por falta de financiación y preveía inversiones en infraestructuras. Ahora, debería revisarse y centrarse en las necesidades más acuciantes pero no sólo a nivel municipal sino comarcal.

Y es que la crisis económica está afectando de lleno a los ayuntamientos pequeños. Las licencias de obras, que son las que más ingresos dejan a las administraciones locales, han caído en picado, lo que ha debilitado considerablemente la capacidad económica de los consistorios. En este sentido, otra de sus reivindicaciones al president fue que en las subvenciones que otorgue el Govern a estos pueblos la aportación municipal no supere en ningún caso el 20 por ciento.

La petición está justificada porque algunos ayuntamientos se han visto obligados a rechazar líneas de subvención relacionadas con el plan de rehabilitación de barrios. En algunos casos, la aportación municipal era de 50 ó 80 por ciento.

Francesc Antich destacó la colaboración que estos municipios necesitan de la Comunitat: «La crisis les está creando problemas y necesitan más ayudas del Govern». El president se comprometió a volverse a reunir en septiembre.

Por su parte, Joana Maria Pascual, gerente de la Mancomunitat, quiso poner de manifiesto que «los municipios del Pla, por conservar el territorio, han dejado de realizar proyectos y han resultado más desfavorecidos que las poblaciones costeras. Ahora, la situación económica es difícil y faltan recursos para emprender proyectos».