Las obras de reforma de la estación de tren de Sant Llorenç se reanudaron ayer tras una paralización de cinco años. La rehabilitación fue adjudicada por el Pacte de Progrés, pero el Partido Popular ordenó pararlas cuando ya se habían desmontado los tejados de los dos edificios principales. Era el verano de 2003 y las obras de la estación de tren de Sant Llorenç quedaron suspendidas «de manera insólita e inaudita y sin que a día de hoy nos hayan explicado el motivo», según señala el alcalde de la localidad, Mateu Puigròs.
Ahora, con un proyecto renovado y adaptado a la llegada del tren se inician las obras de rehabilitación, reforma y ampliación, por un valor de 1.428.000 euros y que, en un plazo de seis meses, llevará a cabo la empresa Melchor Mascaró.
La Conselleria de Mobilitat reanuda de esta forma las obras de recuperación de todo el recinto ferroviario, un solar de 11.000 metros cuadrados, de los que 7.500 son útiles y unos 300 son construcciones. La rehabilitación de los tres edificios se realizará respetando totalmente la estética y la tipología de la construcción y adecuándola a las necesidades actuales. Contará con sala de espera y de venta de billetes, bar-restaurante, sala multiusos, servicios, sala para usos ferroviarios y espacios polivalentes para usos culturales o de ocio del pueblo de Sant Llorenç.
El conseller, Gabriel Vicens destacó la nueva dualidad de usos con el regreso del tren. «Esperamos que de este modo se pueda establecer un vínculo entre la estación como equipamiento fundamental de los servicios ferroviarios, entre la población de Sant Llorenç, y entre las actividades que quieran organizar y realizar las entidades sociales del pueblo y muy especialmente el Ajuntament de Sant Llorenç».
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