«El tema de las barreras es como la gripe, se contagia cerrar caminos, a ver si se contagia también quitar barreras». Jaume Sastre, del Lobby per la Independència, lanzaba ayer un órdago a la población para que combata el cierre de caminos públicos, tal y como hicieron hace ahora una semana media decena de plataformas ciudadanas.
Representantes del Lobby per la Independència, Pro Camins Públics de Pollença y Manacor, Gadma, Ateneo Gabriel Buades, Poble Llibertari, Alternativa EU-Els Verds de Pollença y Caballistes en defensa dels camins i rutes públiques, todos ellos partícipes de la supresión y traslado hasta el Consell de Mallorca de la barrera que impedía el acceso a la carretera vella de Lluc a la altura de la finca de l'Empeltada hace ahora una semana, quisieron ayer dar la cara para demostrar a la ciudadanía que «no hay que tener miedo». «Seguiremos defendiendo lo que es de todos, es nuestro derecho y nuestra obligación. ¿De qué nos pueden acusar? Lo que han de hacer es cumplir la ley», dijo el portavoz de Gadma, Bernat Fiol.
Ninguno de los protagonistas del acto de protesta ha sido requerido para declarar ante la Guardia Civil a pesar de que el propietario de la finca de l'Empeltada, presentó el domingo una denuncia por robo ante la Guardia Civil. «Nos limitamos a llevar ante el Consell una barrera que ocupaba una propiedad del Consell», dijo Bernat Fiol.
El portavoz de la Plataforma Pro Camins Públics i Oberts de Pollença, Joan Ramon Bosch, anunció además el inicio de una campaña para instar a los ciudadanos a que se querellen contra todos aquellos propietarios de fincas que cierran con barreras caminos públicos.
Denuncian además la «pasividad» de la administración pública para atajar un problema que afecta a más de cien caminos de Mallorca. Pro Camins denunció así que al menos tres de los propietarios que han cerrado la carretera Vella de Lluc han recibido en los últimos años subvenciones del Consell de Mallorca pro diferentes conceptos. Así, el propietario de la Empaltada habría recibido ayudas por valor de 52.988 euros, de 22.569 euros el propietario de la finca de la Querencia y de 4.844 el de la finca de Ca Na Borrassa.
El portavoz de Gadma, Bernat Fiol, tiene previsto reunirse la semana próxima con la presidenta del Consell, Francina Armengol, para conseguir que todas las áreas de la institución insular con competencias sobre las vías públicas se coordinen para abrir los caminos públicos.
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