La tradicional corrida de toros y la becerrada popular que cada año se programan en Inca durante las fiestas de San Abdon y San Senen podrían no celebrarse. La Conselleria d'Interior ha denegado a la empresa explotadora de la plaza la autorización para llevar a cabo la becerrada. Interior alega que la legislación relativa a espectáculos taurinos vigente en las Balears no prevé actos como éste, aunque sí que da permiso para la corrida.
Pero esta negativa hace peligrar, de rebote, la celebración de la corrida de toros porque la legislación impide que la administración pública subvencione la corrida. En años anteriores, el Ajuntament d'Inca subvencionaba la becerrada, pero en realidad era también una ayuda indirecta a la corrida, que es deficitaria. Por lo tanto, si no hay becerrada, el Consistorio no puede dar ninguna ayuda y la empresa explotadora de la plaza tendría que afrontar sola los gastos. El empresario, Manuel Lería Martín, ha comunicado al Ajuntament que «sin la subvención y teniendo en cuenta la crisis económica, la celebración de la corrida es imposible».
En este contexto, el alcalde de Inca, Pere Rotger, ha pedido a Interior que reconsidere su postura. Rotger argumenta que durante la becerrada no se produce ningún tipo de maltrato a los animales. El alcalde añade que «en caso de que Interior denegara definitivamente el permiso para hacer la becerrada, nos pondremos en contacto con la empresa organizadora para mirar de encontrar otra solución».
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