Comerciantes y vecinos del bulevard de Peguera se muestran «desconfiados» con el planteamiento municipal de las obras del cambio de firme de la vía, «que el año pasado sólo ocasionaron molestias a nuestra actividad además de empezar tarde y terminar en plena temporada turística».
Los afectados por los trabajos del cambio del adoquinado primitivo a hormigón estampado en cerca de 400 metros del bulevard señalan que «como ocurrió el año pasado, las obras anunciadas a partir del 1 de noviembre han comenzado a final de mes, y su acabado al inicio de marzo amenaza con prolongarse como mínimo otra mensualidad que ya entra en la temporada turística y ocasiona notables perjuicios para todos».
Lo cierto es que de momento el bulevard está cortado en la amplia zona de trabajos a efectos del tráfico rodado, con el problema añadido para los comerciantes y vecinos de la falta de comunicación para viandantes entre ambos márgenes, a causa del vallado.
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