Antoni Pol19/02/10 0:00
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«La reforma de la avenida Reis Catòlics ha resultado cara, se ha ejecutado con retraso y ha provocado más molestias de las necesarias a los vecinos».
Los dos concejales del Bloc per Inca, Antoni Rodríguez y Andreu Caballero, manifestaron ayer su descontento y su «preocupación» por la manera como se ejecutan las obras en la ciudad.
Plazos
Los nacionalistas recordaron que la reforma debía haber finalizado antes del 31 de diciembre de 2009, pero «con el visto bueno del equipo de gobierno, se habrá demorado tres meses. Rodríguez también denunció que el coste del proyecto «se haya encarecido en un 15 por ciento respecto a lo presupuestado inicialmente», de manera que el Ajuntament pagará más de un millón de euros por algo que inicialmente sólo debía costar 780.000 euros. En este sentido, los nacionalistas subrayaron que «las excusas» por las que se ha encarecido la reforma («la evaluación de las instalaciones deficientes existentes de agua potable, pluviales y fecales») eran precisamente algunos de los motivos por los que se efectuaba.
Molestias
Los concejales del Bloc también se refirieron a las molestias «evitables» que ha causado la remodelación. Rodríguez puso el ejemplo de algunos vecinos «que no pudieron sacar el coche de su garaje» cuando una mañana, sin haber recibido aviso previo alguno, se encontraron con la calle cerrada e intransitable.
El concejal nacionalista también lamentó que se hubieran juntado dos obras importantísimas en una misma zona, en referencia a las que se ejecutan en la vecina calle Jaume II. «Toda una serie de despropósitos ocasionados únicamente por la mala gestión y la incompetencia política del equipo de gobierno», sentenciaron.