A última hora de la tarde de ayer cerró sus puertas la XXVII edición de la tradicional Fira del Fang aunque el acto oficial de clausura tuvo lugar el sábado noche.
En esta ocasión han sido algo más de 40.000 las personas que han pasado por el recinto a lo largo de la semana, cifra que supone un descenso en relación a las casi 60.000 del año anterior. No obstante, las ventas se han mantenido.
La reconversión del espacio de exposición interior en una única muestra expositiva de 400 metros cuadrados integrada por obras de los ceramistas participantes, ha resultado un éxito. Tanto los mismos artesanos como las personas visitantes han aplaudido esta iniciativa impulsada por el área de Cultura municipal. A lo largo de la semana un nutrido grupo de alumnos pertenecientes a centros escolares provenientes de toda la isla han participado en el taller didáctico dedicados a los juguetes de cerámica e impartido por el artesano portolà Antoni Vich.
Otra de las novedades consistió en el proyecto expositivo que obtuvo el premio Benet Mas en su nuevo formato. La ganadora, Maria Amengual, de la gerreria i siurelleria can Bernadí Nou de sa Cabaneta recibió su galardón en el acto del sábado.
Finalmente cabe destacar un concierto de ocarinas, interpretado por Carme Hermoso y Antoni Vich, así como el concierto interpretado por la Banda municipal de Marratxí.
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