Este documento se inició en el segundo semestre del año 2008 y ahora ya es una realidad. El departamento de Servicios Sociales se ha puesto al frente de este plan que ha contado con la colaboración de entidades como el centro de salud,institutos o colegios públicos del municipio.
Esta iniciativa responde a la preocupación por parte del Ajuntament de «los graves problemas que provocan las drogas y tras observar que aumenta el consumo de alcohol y otras drogas y que la edad de inicio del consumo es cada vez menor». La regidora de Servicios Sociales, María Pons (PP), destacó que «la misión del Ajuntament en materia de drogas es desarrollar políticas de prevención de las drogodependencias, la incorporación social de los drogodependientes así como limitar la oferta y coordinar las actuaciones sobre drogas en el municipio». El objetivo del Plan contra las drogas es servir de instrumento de planificación y coordinación de diferentes recursos, servicios y programas públicos y privados existentes. «Se trata de conseguir un funcionamiento eficaz, integrado y complementario entre las diferentes regidurías y servicios municipales organismos y agentes sociales para atender las necesidades de la ciudadanía», concluyó la edil.
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