Imagen de la pista polideportiva ayer por la mañana. Las goteras son solamente uno de los problemas.

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El nuevo polideportivo municipal de Son Angelats, una infraestructura creada a través del Plan de Desestacionalización Turística del Govern Matas y que en total habrá tenido un coste de casi ocho millones de euros, ya presenta más de 33 deficiencias, algunas de ellas «graves» y «estructurales» antes incluso de inaugurarse, según señala un reciente informe realizado por los técnicos municipales.

Días atrás el pleno municipal aprobó reclamar, a una de las dos constructoras que intervinieron en la obra, la garantía depositada en su momento. Esta garantía es de 128.000 euros y no está claro que se pueda recuperar ya que la empresa se encuentra en concurso de acreedores.

Mientras tanto, los técnicos han listado los problemas de la infraestructura (abierta en parte a pesar de no estar oficialmente recepcionada) y el Ajuntament espera ahora solucionar con este dinero los numerosos defectos.

Reproches

La oposición pone en duda que la cantidad baste mientras que el PP le reprocha que durante los últimos cuatro años -cuando se llevó a cabo el grueso de la obra- no hiciera nada para exigir una actuación en condiciones.

Según se desprende del informe realizado por los servicios técnicos municipales, la patología detectada en las partes ya ocupadas del inmueble parece, cuando menos, preocupante. Así, los técnicos han observado en el edificio «corrosión grave en la estructura principal y secundaria (pilares, vigas, tensores y soldaduras)», así mismo señalan «grietas estructurales entre la caja de la escalera y el cuerpo de la pista deportiva».

El preocupante informe también habla de «filtraciones en toda la cubierta» y de «mala ejecución del punto de encuentro de la cubierta con la fachada principal» con las consecuentes filtraciones que también se producen «en el encuentro de la marquesina de entrada con la fachada».

También detectan «grietas horizontales en la fachada principal, en el encuentro de la fachada con la cubierta y en el encuentro de la estructura con el hormigón». Algunos defectos afectan a «la totalidad del edificio» y también destacan la existencia de «alicatados estropeados o mal ejecutados en todos los baños y vestuarios».

El pleno del Consistorio solleric también acordó hace unos días encomendar la gestión del edificio, cuando este se pueda abrir completamente, a la empresa municipal Sóller 2010.