Así, la inauguración con el paseillo oficial de autoridades se trasladó del domingo al sábado para evitar suspicacias pero el público mayoritario, fiel a la cita de cada año, disfrutó de las ferias como lo venía haciendo, ajeno a los comicios, el domingo después del Dijous Bo.
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Caimari y Llubí fueron de los primeros municipios de Mallorca en apostar por una feria especializada y su fama goza hoy de una importante proyección en toda la Isla, en contraste con las ferias al uso especialmente en decadencia en tiempos de crisis.
Ayer, aunque la jornada empezó algo floja, Llubí y especialmente Caimari, acabaron por llenar sus calles hasta más no poder. El alcalde pedáneo de Caimari, Pere Seguí, aseguraba cuando pasaban las cinco de la tarde citando datos de la Policía Local que 40.000 personas visitaron la feria este fin de semana, 30.000 de ellas ayer.
La cifra habría sido imposible de no ser por la colaboración de los voluntarios de Protección Civil y también con la colaboración de la Policía Local, encargados de poner orden en un caos imposible de vehículos que colapsa la principal carretera de acceso al núcleo que es además obligada ruta para llegar a Lluc.
Entre las novedades de este año cabe destacar que, una vez consolidado su producto estrella, la aceituna, Caimari ha decidido apostar por un segundo producto, la almendra, al que cedió la principal zona de exposición en la Fira, la plaza, en la que otros años se mostraban prensas tradicionales de aceite, reemplazadas este año por una torradora de almendras.
En la zona de animales, la exhibición de caza de cabras con lazo relevó a anteriores exhibiciones de pastoreo, pioneras en las ferias de la Isla y que después imitaron otros municipios.
En Llubí, desde primera hora de la mañana centenares de curiosos disfrutaron de los productos artesanales derivados de la miel. Durante la Fira se estrenó la nueva agrupación de protección civil.
2 comentarios
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Un 10 per ses fires mallorquines de se Part Forane, es çiment no se pot menjar, i arribera es die que el voldrem canviar per pa.
Cada vegada m'agrada més l'oliva trencada mallorquina. Qualcú ho havia de dir!