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Ante la complicada situación económica de las arcas municipales de sa Pobla, ahora el equipo de gobierno municipal (PP) ha apostado por sacar a concurso la gestión de la escuela de verano para que la actividad tenga un coste cero para el Ajuntament. En el mismo marco de contención del gasto, el gobierno popular también evalúa la posibilidad de no abrir este verano la piscina municipal exterior que se encuentra en el polideportivo y mantener solo en funcionamiento la piscina cubierta.

Con estas nuevas medidas, el Ajuntament de sa Pobla podría ahorrar un total de 51.000 euros durante los dos meses de verano. Durante los años anteriores, el Ajuntament daba una ayuda a la asociación Pa i Mel, la encargada de gestionar la escuela de verano, de 21.000 euros. Por lo que se refiere a la puesta en marcha de la piscina olímpica exterior, desde el Ajuntament se informó que el servicio tiene un déficit de 30.000 euros al año por su funcionamiento sólo durante los meses de julio y agosto.

Contención

Estas medidas por las que ahora apuesta el Ajuntament de sa Pobla se basan en la contención del gasto. El alcalde de la localidad, Biel Serra, explicó que «este año no podemos asumir los 21.000 euros que cuesta a las arcas municipales la escuela de verano, por lo que se ha aprobado el pliego de condiciones para que las empresas o asociaciones que estén interesadas puedan acceder a la gestión de la actividad para que tenga un coste cero para el Ajuntament». En este punto, Serra dejó claro que la asociación Pa i Mel, que hace 15 años que desarrolla la escuela de verano, también puede optar a su explotación.

Por lo que se refiere a que el Ajuntament sopesa la posibilidad de no abrir este año la piscina municipal, Serra declinó hacer declaraciones, aunque no lo desmintió. Según fuentes consultadas, el servicio de piscina durante el verano se mantendrá con la piscina cubierta donde se abrirán los ventanales de la instalación.

Si finalmente, el equipo de gobierno de sa Pobla apuesta por no abrir la piscina por el elevado coste que supone la puesta a punto de la instalación, la medida no comporta que el próximo verano se apueste por ponerla en funcionamiento. La piscina pequeña exterior sí funcionará.