Antoni Vallespir entregó la teja firmada por el obispo a los ‘Blavets’ en representación de la Mare de Déu. | P. Pellicer

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El nuevo obispo de Mallorca, Javier Salinas, ya ha aportado su teja para la rehabilitación de los desperfectos ocasionados por el cap de fibló que afectó al santuario de Lluc el pasado mes de septiembre.

Fue mediante la televisión autonómica IB3, que le hizo llegar una teja a Salinas, en Girona, para que el la firmará y después el mismo periodista del canal balear la hizo llegar al santuario de Lluc durante la misa de ayer en la que los Blavets también se sumaron al acto de agradecimiento al nuevo obispo dedicándole una Salve.

Construir

La teja firmada por el nuevo prelado de la iglesia mallorquina pidió, a la Mare de Déu de Lluc, en su texto sobre la teja que le ayude a construir la iglesia del señor: «Santa Maria Nostra Senyora de Lluc ajudam a construir l'església del Senyor».

La teja del nuevo obispo de Mallorca se suma a las de los miles de visitantes del santuario que han querido apoyar al emblemático espacio espiritual de la Serra de Tramuntana firmando uno de estos elementos constructivos para la reconstrucción de las partes dañadas.

«Un cap de fibló no pot contra la voluntat d'un poble», con este eslogan los trabajos de reconstrucción siguen su ritmo en el santuario, y fue en la homilía de ayer en la que el prior Antoni Vallespir, agradeció al nuevo obispo de Mallorca, Javier Salinas, su ayuda que se simbolizó con la entrega de la teja a los Blavets como representantes de la Mare de Déu de Lluc.