Miquel Cifre (Suma pel Canvi) dio cuenta ayer noche al pleno de su renuncia. | Efe

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«Igual que cuando comencé hoy aún tengo utopías y sueños, ahora mi gran sueño es que en este país mío haya un presidente de Gobierno que tenga fuerza para poner fin a este silencioso mercadeo del territorio que convierte esta Isla en un infierno de intereses». El socialista Miquel Cifre dio cuenta ayer noche en el transcurso del pleno ordinario de Santa Margalida de su renuncia como alcalde.

El Ajuntament elegirá hoy a las 19.30 horas en un pleno extraordinario al nuevo alcalde del municipio, Antoni Reus (Suma) que cuenta con el apoyo de sus compañeros de Suma y también de Covergència. Tras votar a Reus como alcalde Cifre dará cuenta esta tarde de su renuncia como regidor.

«La lucha continúa, ahora seguiré luchando desde otro ámbito, como activista cultural y social, siempre apoyando a los que buscan hacer un país y una tierra más justa y solidaria y que de verdad están comprometidos en la lucha por sus rasgos de identidad». Miquel Cifre cerró ayer noche su discurso de despedida como alcalde con estas palabras en un pleno claramente emotivo.

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El ya exalcalde de Santa Margalida se despide después de 23 años de servicio público en los que ha sido alcalde en dos ocasiones, la primera de ellas (junio 1995/diciembre 1997) interrumpida por una moción de censura que presentaron el PP y Can Picafort Unit.

En su discurso de despedida Cifre tuvo un recuerdo para aquellas personas que han estado a su lado estos 23 años y muy especialmente para aquellos que ya no están, Sión Salas y su compañero de batallas políticas Tòfol Salvà.

Cifre hizo también una mención especial a su socio de gobierno Joan Monjo (Convergència) que ya le hizo alcalde en 1995. «Las dos veces que he sido alcalde siempre me ha dado su apoyo y consideración», dijo.