Las estructuras de Ruberts que deben ser derribadas. | Antoni Pol

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El Govern autonómico no ha atendido la petición de ayuda que le formuló hace tres meses el Ajuntament de Sencelles en relación al derribo de los adosados ilegales de Ruberts. En consecuencia, el alcalde de Sencelles, Joan Carles Verd (CxI), se entrevistará hoy con los distintos portavoces de los grupos parlamentarios (el PP incluido) para pedirles que exijan al Ejecutivo que se implique.

En 14 de marzo pasado, el pleno de Sencelles aprobó, con el apoyo del PP, una proposición para pedir al Govern y al Consell que, del mismo modo que se hizo con el municipio de Campos respeto a Ses Covetes, colaborasen para ejecutar la sentencia judicial que ordena derribar los adosados de Ruberts.

El alcalde Verd confirmó ayer que el Consell le comunicó su disposición a colaborar en los mismos términos que se hizo con Campos, pero que el Govern aun no les ha contestado. «No hemos recibido respuesta oficial. Sin embargo, gente del PP nos ha dicho informalmente que no hay intención de colaborar», explicó. «Solo pedimos el mismo trato que se dispensó a Campos», insistió Verd.

Trámitación

El alcalde relató que el Ajuntament había paralizado los trámites para licitar las obras de demolición a la espera de una respuesta del Govern, pero que ahora los retomará en solitario. Las obras tienen que haber empezado antes del 1 de octubre, establecieron los tribunales. El coste de demolición está previsto en unos 100.000 euros.