La Conselleria d'Agricultura, Medi Ambient i Territori del Govern ha aprobado el pliego de condiciones que regulan la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Serra de Tramuntana–Costa Nord que reconoce la singularidad de sus vinos en relación a las características de la zona.
La adaptación de esta regulación a la normativa europea incluye la interacción del medio geográfico donde se cultivan las distintas variedades de uva con las características finales del producto vitivinícola.
Según recoge el documento, gracias a la especificidad que le ha transmitido la zona de producción, el vino con IGP Serra de Tramuntana–Costa Nord ha adquirido una reputación propia y acreditada a causa de determinadas características organolépticas y químicas que tienen un vínculo directo con la zona geográfica. Estas se traducen en un vino de color rojo intenso con aroma potente y amplio del que destaca su riqueza alcohólica, a consecuencia de la insolación y temperaturas medianas elevadas que compensan el efecto reductor de una pluviometría moderada.
Por otra parte, la orografía del terreno del cultivo dificulta la mecanización en la recolección de la uva, ya que las viñas se encuentran plantadas sobre marjades.
A mano
Sin embargo, en estas condiciones orográficas, el factor humano adquiere una mayor importancia, lo que conlleva que los trabajos de vendimia se efectúan casi exclusivamente a mano, permitiendo así seleccionar la uva justo en su punto de maduración más óptimo.
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