Desde la asociación de comerciantes han registrado un documento en el Ajuntament donde se solicita que se vuelva a la situación anterior. Federico Cerro, presidente de la asociación explicó a Ultima Hora que «en el 2010 cuando se informó de la construcción de esta infraestructura presentamos un estudio económico de nuestra zona. En él se argumentaban las consecuencias negativas que conllevaría el carril bici para la avenida. Dificulta la circulación y afecta a la movilidad».
Cerro añadía que «son perjudicados una cincuentena de comercios. Casi el 98% están de acuerdo en esta petición. La implantación de la ORA también sería positiva porque habría una mayor movilidad de vehículos».
El presidente también quiso dejar claro que «no nos oponemos a la infraestructura del carril bici en general porque ha mejorado mucho la imagen de la zona pero en este tramo consideramos que no es necesario. Esta avenida es la vía de acceso natural a la zona costera».
Por su parte, el Partido Popular, en la oposición, también quiso mostrar su apoyo a los comerciantes. Así se pronunciaba el portavoz, Jaume Servera: «En su momento fuimos muy críticos con este tramo del carril bici. Consideramos que fue un capricho de un grupo concreto y hoy tres años después vemos que los comerciantes han salido perjudicados. El resultado no ha dejado satisfecho a nadie y a nivel de circulación ha sido un desastre, tanto para los residentes como para los negocios».
Por parte del equipo de gobierno, el alcalde, Antoni Servera, manifestó que «nos hemos reunido con los comerciantes y nos han presentado su propuesta. No se descarta nada y lo que se hará es valorar la situación».
3 comentarios
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Supongo que tendran sus motivos, porque no los dicen
Jo trob que el carril bici fonamental és aquell que voreja la badia. Pel tram Cala Millor-Son Servera, el carril bici podria passar pel altres carrers que no Joan Servera Camps (inici), la qual cosa sembla tècnicament possible.
Carril bici si. Siempre que no entorpezca o perturbe el tránsito rodado, o el placer de pasearse plácidamente por una zona peatonal como ocurre en el paseo de Cala Millor a Cala Bona o viceversa, donde los peatones no pueden pasearse tranquilamente sin prestar atención continuada por si aparece alguna bicicleta. Con el agravante, que las mismas bicicletas circulan a su aire fuera del carril bici impunemente cuando les antoja para mayor intranquilidad de los peatones. Una mejora para los ciclistas en detrimento de los peatones.