El PSOE, contrario al proyecto. | Maria Nadal

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Aunque el Consell de Mallorca ha ampliado el plazo para presentar las alegaciones quince días más, el PSOE de Inca hizo públicas ayer las alegaciones que han presentado al proyecto de la ronda norte de la ciudad mediante las que instan al Consell de Mallorca a construir solamente la primera fase de la nueva carretera y «comprobar si es suficiente para terminar con los problemas de tráfico de la ciudad», según palabras del portavoz socialista, Xavier Ramis. Además, desde el PSOE también instan a eliminar del proyecto los viales de servicio que «incrementan el coste de la obra y suponen un mayor consumo de territorio».

Con la aplicación de estas dos medidas, los socialistas de la ciudad creen que el coste del proyecto se podría reducir en un 50 por ciento. «Si una vez ejecutada la primera fase se comprueba que no es suficiente se podrían continuar las obras del proyecto completo», opinó ayer Xavier Ramis.

Por otra parte, desde el PSOE local temen por las consecuencias negativas de la ronda sobre el comercio de la ciudad. «Hoy en día el motor económico de Inca es el comercio y con la construcción de la ronda norte propiciamos a que los vehículos se dirijan hacia Palma en lugar de entrar en Inca para realizar sus comprar», apuntó Ramis. En este punto, el portavoz socialista añadió que «una medida para paliar esta actuación sería construir zonas de aparcamiento en las entradas de la ciudad para facilitar el estacionamiento de los vehículos para que la gente de los pueblos cercanos puedan acceder al centro».

Además, tanto PSOE como Més per Inca mostraron su preocupación por la afectación de los caminos rurales que se verán cortados por la ronda norte. «Uno de los caminos más utilizados por la gente de Inca que va a caminar es el camino antiguo de Biniamar que, con la nueva carretera, quedará totalmente cortado», según palabras del regidor del PSOE en el Ajuntament d'Inca Virgilio Moreno.