Unos 2.000 mallorquines, entre ellos 300 de Sencelles, se desplazaron hasta la plaza de San Pedro del Vaticano de Roma para presenciar el anuncio.
Su beatificación se celebró en Roma y en Sencelles simultáneamente. Los festejos se alargaron un mes y medio.
Francinaina Cirer Carbonell nació en Sencelles en 1781, en una familia de payeses, y falleció en 1855 en el mismo pueblo. Fue religiosa de la congregación de las Hermanas de la Caridad y, en Sencelles, ya en vida, era considerada una santa.
Entre los miembros de la delegación mallorquina que se desplazó a Roma estaban el obispo Teodor Ubeda; Simó J. Garau, entonces rector de Sencelles y Gabriel Cañellas, que presidía el Govern, entre otros. En Sencelles, el pueblo se engalanó para la ocasión y vivió varias semanas de celebraciones.
El próximo 11 de octubre la iglesia de Sencelles acogerá una celebración de acción de gracias en la que se festejará el 25º aniversario de la beatificación. Organiza el acto la asociación Tia Xiroia.
2 comentarios
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Sa Tía Xiroia, Mare Superiora, des de el cel ajuda a un poble que no sap que és el que vol!
Saquen las antenas de telefonía móvil del pueblo.Planten cara al Diablo,como lo hizo la Santa,y no vivan de rentas.