Los ‘castellers’ participaron en el ‘cercaviles’. | Assumpta Bassa

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Manacor despertó el sábado con mucho ruido. Y es que diez batucadas, procedentes de diferentes puntos de la Isla, se concentraron en la ciudad para celebrar su décimo aniversario. Salieron de diez puntos diferentes y una ruidosa ‘tamborada' ofreció un espectáculo sonoro que convirtió a la localidad del Llevant en la capital de la percusión. Pequeños y mayores disfrutaron durante la mañana de esta concentración.

Las Fires i Festes de Primavera continúan en Manacor con un gran éxito de participación y con una variada oferta para deleitar a los gustos más exigentes.

Tras una mañana musical llegaron unas celebraciones de altura. La Plaça de sa Mora, a partir de las 17,30 horas, acogió la Plantada de Gegants que, en esta ocasión, llega a su quince edición plenamente consolida.

Los gigantes anfitriones, en Vicenç y na Catalina recibieron a una nutrida representación de personajes que se adueñaron del centro de Manacor para llevar a los vecinos el espíritu de la tradición. Un pasacalles llenó de color la ciudad y la Plaça de sa Bassa vivió una ballada popular que contó con la colaboración de la colla castellera Al·lots de Llevant.