Las calles, bares y restaurantes de Inca se han llenado de gente durante la celebración del Dimecres Bo. | Jaume Morey

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Este Dimecres Bo es uno de los más multitudinarios de los últimos años. Las calles del centro han registrado un constante fluir de gente que ya ha podido disfrutar de muchos de los atractivos que se podrán ver en la feria del Dijous Bo.

A partir de las nueve de la noche los cellers han comenzado a servir sus especialidades, aunque la porcella sigue siendo protagonista. También los bares no han parado de servir los variados que tan populares son en el Dimecres Bo.

Desde primera hora de la tarde, y se espera que hasta bien entrada la madrugada, los bares y pubs de la ciudad han acogido a los más marchosos, tanto en el interior como en el exterior. Una noche festiva y muy animada que marca el preámbulo a la gran feria del Dijous Bo.