El colectivo de pesca submarina asegura no entender por qué la prohibición solo les afectará a ellos.

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La prohibición de la pesca submarina en la Reserva marítima de Llevant ha provocado duras críticas entre el colectivo de pescadores submarinos, clubs de actividades subacuáticas y comercios relacionados. Aseguran que es una medida de «excepcional radicalidad» ya que vulnera «los derechos de acceso al mar y a sus recursos» para los pescadores submarinos.

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La decisión de prohibir esta actividad en aguas de la Reserva se tomó el pasado 18 de mayo en el Consell Pesquer, una medida que el Govern aprovó a propuesta de los pescadores, en concreto de las cofrarías de Alcúdia y Cala Rajada que son las que faenan en la zona. Ante esta decisión, el colectivo de pesca submarina asegura no entender por qué la prohibición solo les afectará a ellos y no a otras modalidades recreativas. «Tal vez porque nosotros somos un colectivo pequeño que debemos representar solo el 4% de los recreativos», apunta uno de los pescadores.

Aseguran que «el detonante no ha sido el resultado de estudios y conclusiones científicas, sino que, uniteralmente, un sector que vive de un recurso público pide que se eche a otro sector, sin más. Increíble pero cierto». En un comunicado afirman que su colectivo siempre ha apoyado la creación de reservas integrales o «con un plan de usos adecuado y con las restricciones necesarias» pero critican la rapidez de la decisión sin que, previamente, la Conselleria de Medi Ambient les haya consultado. «Todo a sido de golpe y porrazo», recalcan mientras confían que se «recapacite» la decisión del Consell Pesquer.