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Las numerosas nubes de la mañana amenazaban lluvia, pero el mal presagio no pudo frenar la explosión de colores que tiñó Inca este viernes. Música, espectáculos, refrescos y, sobre todo, muchas ganas de fiesta fueron los ingredientes principales de Orgullosament Inca, el primer festival LGTBI de toda la part forana.

La concentración empezaba en la plaza España, delante del Ajuntament, pero mucho antes ya resonaba por las calles A quién le importa de Alaska y Dinarama. Todo un himno.

La lectura del manifiesto por parte de Jan Gómez, presidente de la asociación Ben Amics, dio comienzo al festival, al que le siguió un pasacalles con una llamativa carroza y el posterior pregón a cargo de las ya conocidas Topacio Fresh y la vedette Vivian Caoba.

En el discurso, Gómez exigió la urgente aprobación de un protocolo unificado para la atención a las personas transexuales –tanto menores como adultas– en Balears, además de la aprobación de un pacto de Estado por el VIH frente a su estigma y discriminación y, finalmente, establecer unas medidas efectivas en el sistema educativo para tratar la diversidad sexual y de género.

Mari Carmen Oses, regidora de Igualtat de Inca, destacó la presencia de jóvenes y niños en la celebración. «Es algo muy positivo porque crecerán con el valor de la igualdad», dijo.

Después arrancaron diversas actuaciones como la de Yamila Visual Dance, las ya nombradas Topacio y Caoba, el show de Lolita Khaos, el DJ Tito Deluxe, además de un espectáculo de fuego. Para recuperar fuerzas estaban las famosas caravanas food trucks en las que se ofrecían bebidas. A pesar del carácter festivo, no faltó el minuto de silencio dedicado a las víctimas del atentado de Niza.