En concreto, esta oficina da servicio a los municipios de Ariany, Artà, Capdepera, Manacor, Petra, Sant Joan, Sant Llorenç, Son Servera y Vilafranca de Bonany, con una población total de más de 88.000 habitantes.
En las nuevas dependencias trabajan 16 personas del SOIB y diez del SEPE, que se incrementa con función de las campañas. El personal del SOIB se distribuye en cuatro personas en Orientación, cuatro en Intermediación, cinco en demanda, un auxiliar de información, una persona de seguridad y la directora de la Oficina. Las oficinas pueden dar cabida hasta 32 trabajadores.
Las tres áreas de servicios que ofrece son Demandas, Orientación e Intermediación. En la actualidad, las personas demandantes son unas 4.500, que en invierno pueden llegar a más de 12.000 (con una afluencia de citas que el mes de diciembre superan las 400 personas diarias). Los datos de orientación del último año, hasta octubre, suponen atender unos 1.000 usuarios.
Respecto a las ofertas, este mismo año entraron 454 y hacia 1.900 usuarios pasaron por Intermediación. Hasta abril de 2018, se han atendido 864 y se han tramitado 107 ofertas. El número total de ofertas gestionadas, desde 2016 hasta ahora, asciende a 954 y el número de candidatos vinculados supera los 4.400.
Además de la cartera de servicios habituales, la oficina de Manacor gestiona todas las convocatorias públicas de los programas de políticas activas de empleo.
Las obras de reforma y adecuación de la oficina han tenido una inversión de 306.000 euros y el contrato de alquiler se ha hecho a 15 años. Las instalaciones están en funcionamiento desde junio y disponen de zonas de atención grupal e individual.
La presidenta Armengol ha hecho esta visita acompañada del conseller de Trabajo, Comercio e Industria, Iago Negueruela, el director general de Empleo y Economía, Llorenç Pou; el director del SOIB, Pere Torrens, y la alcaldesa de Manacor, Catalina Riera, entre otras autoridades.
Armengol ha subrayado la importancia de «renovar y adaptar las infraestructuras del SOIB, para que sea un instrumento cercano y accesible a la ciudadanía y garantizar unos servicios de calidad a todos aquellos que buscan trabajo».
La presidenta también ha recalcado que una de las prioridades del Plan de Empleo era «modernizar el SOIB para volviera a ser un referente para ciudadanos» y «una puerta de entrada a las políticas de empleo». Además, ha destacado el incremento de los recursos por personas, que ha pasado de 720 a 2.081 euros por desocupado en tres años.
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