Robert Busquet ante la fábrica de cemento de Lloseta.

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La plataforma Units per Conservar lanza una nueva propuesta al Govern para potenciar el transporte público a través de energías renovables. La propuesta se une a la que ya presentó el pasado mes de junio para crear una línea de metro de circunvalación en Palma, y así se lo han hecho llegar a los responsables de Movilitat del Govern. En concreto, Units per Conservar propone un cambio de modelo ferroviario hacia «unidades propulsadas por hidrógeno», explica el portavoz de la plataforma Robert Busquet. Países como Alemania y el Reino Unido ya han hecho una apuesta para utilizar el hidrógeno como ‘combustible' para sus trenes «ahorrando así futuros costes de electrificación y mantenimiento».

«Consultados los datos del Ministerio de Fomento el coste de electrificar cada kilómetro de línea es aproximadamente de 500 mil euros, un coste que no tiene el hidrogeno», ejemplifica Busquet que destaca que si el objetivo es fomentar el ferrocarril en diversos puntos de la Isla la electrificación saldría muy cara.

El portavoz de la plataforma mantiene que su propuesta es una previsión a largo plazo, «no significa modificar las líneas de tren existentes, sino que las rutas nuevas utilicen el hidrógeno que abastecerá la antigua fábrica de Lloseta», añade. Recalca también que la apuesta del Govern debería ser un transporte con energías renovables 100 % ya que «hay medios para generar hidrógeno por medio de fuentes renovables, sin necesidad de generar más emisiones». «Las previsiones del propio Govern son fabricar hidrógeno en la anunciada planta de Lloseta para 2021, por lo que esta opción para su uso ferroviario ayudaría a su rentabilización», sentencia.