El regidor de Medi Ambient, Sebastià Llodrà, tildó los resultados de «óptimos». Se ha conseguido pasar del 85 % de basura no reciclada (que se llevaba a incinerar) en 2019 al 26 % y se ha alcanzado un 45 % de materia orgánica. El pasado viernes, por ejemplo, se recogieron 4,5 toneladas de materia orgánica en el centro de Manacor y 2,6 toneladas de orgánica en Son Macià y Porto Cristo.
Tanto Llodrà como el técnico de medio ambiente, Antoni Pascual, explicaron que el estado de alarma, que ha obligado al confinamiento de los vecinos, puede haber propiciado estos resultados. «Los operarios detectan si una bolsa no está bien reciclada y la señalizan. A la mañana siguiente, los informadores acuden a los hogares para esclarecer dudas. Que la gente esté en sus casas ha ayudado», según Pascual, que añadió que un total de 4.500 casas se han adherido a la campaña de tarifa reducida, unos 1.000 hogares más de los previstos por el Ajuntament de Manacor.
Por otra parte, el regidor de Participació Ciutadana, Joan Gaià, habló de un plan de voluntarios que se ha impulsado para ayudar a las personas que lo necesiten. «Tenemos un centenar de personas que se han apuntado a este proyecto voluntario y ahora contactaremos con ellos para indicarles cómo pueden ayudar», explicó Gaià, que añadió que se destinarán reforzar, sobre todo, a Serveis Socials «que ahora está desbordado».
Además, Joan Gaià, reivindicó la necesidad de que el Gobierno permita a los vecinos acudir a sus huertos particulares y agradeció el esfuerzo de los «payeses que limpian el municipio cada semana».
1 comentario
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Me parece muy bien, pero me gustaría saber el destino de los desperdicios orgánicos, más misterioso que para el plástico o el vidrio.