Estos días se cumplen cuatro años de la apertura, por primera vez, de las fosas del cementerio de Porreres. Durante aquellos días de trabajo se percataron que las fosas restantes, los agujeros excavados, y los restos humanos podrían estar bajo las construcciones posteriores al 1936. | Archivo

TW
26

Este lunes se iniciará la demolición de los nichos y capillas del cementerio de Porreres que han de permitir finalizar los trabajos de exhumación de los restos de las víctimas de la represión de la Guerra Civil, entre los que podrían encontrarse los de Aurora Picornell. Se trata de la excavación de la llamada fosa número 5 que ha de culminar los trabajos empezados ahora hace cuatro años.

En las últimas dos semanas los responsables del cementerio local han procedido a retirar, con el visto bueno de las familias, los restos humanos que aún permanecían en los nichos o capillas afectados. Los restos se han trasladado a otros espacios de propiedad del Ajuntament u otras sepulturas de los familiares. Todo, en el mismo cementerio.

Terminar

Estos trabajos, que este lunes empiezan, forman parte de la segunda fase de excavación y exhumación pendiente de ejecutar dentro del Pla de Fosses de 2018 del Govern. Y es que tras la histórica primera intervención de noviembre de 2016 se percató de la existencia de restos humanos debajo de las construcciones. Las edificaciones son posteriores a los años 1936 y 1937 cuando se realizaron estas fosas para enterrar las decenas de personas asesinadas en la parte posterior del oratorio cercano de la Creu.

Noticias relacionadas

Esta segunda fase no se pudo llevar a cabo como se había previsto en 2018. Unos meses antes de iniciar las labores, la muerte de una vecina de la localidad y posterior entierro en una de las sepulturas provocó la suspensión de los trabajos.

Ahora, semanas después de realizar ya la tercera fase que sirvió para descartar la existencia de restos en la zona ajardinada adyacente, se culminará la investigación de Porreres. En esta segunda intervención existe la esperanza de poder hallar los restos, por ejemplo, de Aurora Picornell, por mencionar uno de los personajes más icónicos.

Recordemos que en las excavaciones de 2016 se pudo ver cómo cada grupo de fusilados tenía su propia fosa. También hay que recordar que de la primera intervención aún quedan restos por identificar que no han podido ser cotejados con las muestras de ADN ofrecidas por las personas que creen que tienen familiares en una de estas fosas de Porreres.

De aquella primera intervención se extrajeron 49 muestras óseas y se pudieron conocer los nombres de 14 personas con toda certeza. Entre los que podemos señalar los alcaldes republicanos de Esporles, Tomàs Seguí, y el de Costitx, Pere Vallespir, o el hermano de Aurora Picornell, Ignasi.

Este lunes a las 11.30h el secretario autonómico de Memòria Democràtica i Bon Govern, Jesús Jurado y la alcaldesa de Porreres, Xisca Mora visitarán el inicio de estos trabajos.