Las actuaciones se han llevado a cabo, por un lado, en el tramo de la autopista de Llevant (MA-19) que atraviesa la localidad y, por otro, en una parte de la carretera que une Santanyí con Cala Figuera (Ma-6102).
El objetivo de las tareas ha sido crear un espacio «más seguro y confortable» para los peatones y también para la circulación de vehículos a motor. En concreto, se ha creado una zona donde la velocidad máxima permitida es de 30 kilómetro por hora, se ha instalado señalización vertical y se ha dispuesto balizamiento e iluminación en la calzada para advertir a los conductores de la medida.
Sevillano ha explicado que «en muchos de nuestros pueblos, con el paso del tiempo y con el elevado aumento de vehículos, las carreteras que los atraviesan han convertido en un problema para los residentes». «Con estas actuaciones queremos solucionarlos dando protagonismo y prioridad a los peatones por encima de los coches, pacificando los entornos urbanos y creando espacios más amables, sostenibles y seguros», ha dicho.
Además, ha comunicado que «hace una semana ya, anunciamos actuaciones similares en Deià y Caimari, y en el mismo sentido presentamos las realizadas en Santanyí, y los próximos días anunciaremos las realizadas en otros municipios. Seguimos trabajando por nuestros pueblos».
Las tareas se han completado con el repintado de los pasos para peatones ya existentes y la ejecución de otros pasos sobre-elevados para obligar a los vehículos a disminuir la velocidad.
En el tramo de la carretera que conduce a Cala Figuera y Cala Santanyí se ha apretado la anchura de los carriles y se ha dispuesto una media en el centro de la calzada además de ampliar el espacio por donde pueden transitar los peatones.
También se han colocado bandas transversales de alerta que tienen como función actuar como señal de advertencia acústica y vibratoria para alertar.
El conseller insular ha aprovechado para anunciar también la mejora de otros puntos de la red secundaria de Mallorca. En concreto, el departamento de Movilidad e Infraestructuras ha invertido 34.500 euros en mejorar el firme de la carretera Ma-5010 a su paso por Algaida.
Se trata de un tramo urbano donde se concentra la zona escolar del municipio y que sufría un deterioro acusado del asfalto por el paso de vehículos pesados provocados por los desvíos de tráfico realizados durante las obras de la variante.
También se ha efectuado un refuerzo del firme en diferentes tramos de la ronda de sa Pobla (Ma-3450), unas tareas presupuestadas en 123.358 euros y que se han completado con señalización horizontal en el centro de la calzada y pasos para peatones.
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