Los residuos fueron arrojados en una zona protegida. | P.L.

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El Ajuntament de Santa Maria ha abierto un expediente que puede acarrear una multa de hasta trescientos mil euros al autor de un vertido de residuos y materiales peligrosos en una finca rústica protegida como Área Natural de Especial Interés (ANEI), en el Puig de Son Seguí.

La Policía Local de Santa Maria ha logrado identificar a la persona que presuntamente arrojó numerosos botes de pintura y otros materiales en esta zona protegida, gracias al hallazgo, entre los residuos abandonados, de una factura.

Infracción muy grave

Los hechos denunciados se remontan al pasado mes de enero La Policía Local pudo constatar el abandono de un notable volumen de botes de pintura en esta zona protegida y recabó información para identificar al autor, que no ha sido localizado. Estos hechos están tipificados como infracción «muy grave» en la ordenanza municipal de gestión de residuos, sancionable con multas desde 1.500 a 40.000 euros. Sin embargo, en el caso de residuos considerados peligrosos, la cuantía de la sanción puede alcanzar los 300.000 euros.

Se da la circunstancia de que la finca rústica en la que fueron abandonados estos residuos está protegida, incrementando la gravedad de este acto incívico. El alcalde de Santa Maria, Nicolau Canyelles (Més) señaló ayer que, pese a que el expediente aún está abierto, «nuestro deseo es que termine con una sanción ejemplar, que los que vienen al municipio a tirar basuras sepan que aquí estos actos tienen consecuencias». La cuantía de la multa se decidirá en los próximos 15 días.