Algunas carreteras municipales se han limitado a 30 km/h.

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El regidor de On Son Servera-PI y profesor de formación vial, Antoni Cànoves, critica la mala señalización de la velocidad máxima en varias vías del municipio de Son Servera tras la entrada en vigor de la nueva normativa estatal de tráfico que obliga a pasar de 50 kilómetros por hora a 50, 30 o 20 kilómetros por hora según las características de las calles.

Cànoves explica que «en Son Servera se ha hecho una mala interpretación de esta ley y se han señalizado distintos tramos de carretera con velocidad máxima de 30 kilómetros por hora lo que es una locura porque no se puede circular por carretera a solo 30 kilómetros por hora. Tienen que haber un equilibrio».

Además de mala señalización según el portavoz «el problema también radica en que ya se han instalado radares en estos puntos y se han tramitado multas» y recuerda que «el espíritu de la ley es la de evitar atropellos en el caso urbano por lo que no tiene sentido limitar a 30 las zonas de carreteras, que en estos casos, son municipales».

Según Cànoves, los tramos en los que se debe modificar la velocidad máxima son el que va de la rotonda de la gasolinera hacia el casco urbano, desde la misma rotonda hacia el polígono industrial y la carretera del Pont Verd que une los núcleos urbanos de Cala Bona con la urbanización de la Costa dels Pins, que tiene una longitud de 3 kilómetros. En estos puntos, el edil propone aumentar la velocidad a 50 kilómetros por hora.