Imagen de la reunión. | Jaime Mora

TW
3

El conseller insular de Movilidad, Iván Sevillano, rechaza que se hayan producido atascos de 45 minutos debido a las obras de mantenimiento del túnel de Son Vic, y cifra el retraso que sufren los conductores en algo más de cinco minutos. Así lo aseguró ayer durante una reunión de seguimiento de los trabajos, aseverando que se trabaja «24 horas al día» para intentar que la primera fase de la obra esté acabada, según el plazo previsto, el próximo 7 de abril. Sevillano explicó que los desprendimientos que el túnel sufrió a finales del pasado año obligaron a acelerar los trabajos de mantenimiento, e impidieron por tanto que se retrasara la obra hasta una vez pasada la temporada turística.   

A la reunión acudieron representantes del Ajuntament de Calvià, vecinos y hoteleros de Peguera, y ediles del PP en el consistorio andritxol. Entre ellos, Jaume Porcel lamentó no haber sido formalmente invitados a pesar de la «gran afectación» que la obra tiene también para residentes y comerciantes del municipio de poniente. Sevillano aclaró que ha sido en todo caso el equipo de gobierno de Andratx el que ha declinado implicarse en una reunión como la de ayer. «Les hicimos el mismo ofrecimiento, pero ha habido menos interés», remarcó el conseller. Recuerdan desde el Consell que a partir del 30 de junio y hasta el 2 de noviembre no se llevará a cabo ningún trabajo de mantenimiento, para retomarlos en esa fecha durante otros tres meses, ya en horario nocturno.

El encuentro sirvió también para avanzar que, tras las obras del túnel de Son Vic, se pondrán en marcha las tareas de mantenimiento en el de sa Coma, más pequeño pero que también podría alterar el tráfico entre Palma y Andratx. «Si se tuviera que cerrar por completo, solo se trataría de cuatro o cinco días», matizó Sevillano. Las quejas de los residentes se centraron también en las decisiones adoptadas por el TIB en el sentido de cancelar líneas directas que unían Palma con Peguera y Andratx.