El pleno aprobó la declaración antitaurina hace siete años.

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Calvià seguirá siendo una localidad antitaurina al margen de lo que formalmente establezca la Justicia. Así lo ha expresado el Ajuntament tras conocer la resolución del TSJIB que tumba la decisión adoptada por el pleno municipal hace ahora siete años. Desde el equipo de gobierno señalan que a partir de ahora «estudiarán la sentencia» para saber de qué forma repercutirá a efectos prácticos, habida cuenta de que en Calvià no existe ni plaza de toros ni especial apego a la llamada Fiesta Nacional. En todo caso –matizan desde el Consistorio– la posición política del equipo de gobierno es «la misma» que ya se manifestó en la pasada legislatura, cuando el PSOE estaba también al frente del Ajuntament.

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La moción fue presentada por la extinta coalición Esquerra Oberta, que formaban el edil de Esquerra Unida, Alfonso Rodríguez, y el regidor de Més, Rafel Sedano. Ya como responsable municipal de Medi Ambient que es en la presente legislatura, el ecosoberanista recuerda que el de ‘antitaurino' no deja de ser un sello simbólico en un municipio sin tradición ni historia alrededor de los toros. «Se trata debatir sobre si estamos a favor del maltrato animal o si nos posicionamos en políticas de izquierdas», explicaba ayer Sedano, lamentando que «una vez más», un tribunal de justicia «haya entrado en valoraciones políticas».

El Tribunal recuerda en su escrito que los ayuntamientos no tienen competencia para prohibir las corridas de toros en sus municipios, algo en lo que también pone el acento la Fundación Toro de Lidia, que ya ha ganado otros recursos similares en Palma o Binissalem.