Xisco Ramón y su abuela Ventura Barceló, de 91 años, viven en la planta baja. Esta finca tiene más de cien años, que la mujer heredó de su madre. Lleva aquí toda su vida pero nunca había pasado la ITE. En 2018, recibieron la visita de una técnica que declaró la casa desfavorable. Tenían que cambiar el tejado. Pero por diversas trifulcas con su vecino de arriba la finca empeoró. Tras una segunda inspección a la casa de Ventura en 2020 se le aconsejó abandonarla por «peligro inminente». Sin embargo, ese día el propietario de arriba no quiso dejar entrar al inspector .
El Ayuntamiento de Marratxí da la razón a Ventura y a su nieto, quienes, en los últimos años, denunciaron la situación que había en la finca, demostrando que ellos sí apuntalaron dos habitaciones, se habían ido de la casa pero esperaban que el vecino lo hiciera también para empezar la reforma de más de 20.000 euros.
La semana que viene, un técnico del consistorio acudirá al domicilio del vecino de arriba a fin de completar el informe. Desde el Ayuntamiento aseguran que ese propietario cuenta con diversas infracciones y multas. En caso de no querer cumplir con los consejos técnicos, y no dejase entrar al experto para finalizar el informe, el consistorio aplicaría un procedimiento judicial.
Punto de vista
El Juzgado de Paz mediará el conflicto vecinal
1 comentario
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O sigui, ha de sortir pel diari, per que facin cas a aquests pobres CIUTADANS . VERGONYA.