Imagen del movimiento de motocicletas en el Mirador de ses Barques.

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De nuevo la carretera de la Serra de Tramuntana (Ma-10) y uno de sus puntos calientes vuelve a estar en el centro del debate. Esta vez, un vídeo que circula por las redes sociales y que muestra cómo una motocicleta pierde adherencia con el asfalto en la larga curva del Mirador de ses Barques, impactando contra un vehículo en sentido descendente, ha reabierto el debate y genera indignación entre vecinos y usuarios de la red.

De hecho, la plataforma 'Indignats Ma-10' ha trasladado ese sentir a través de una nota en la que reiteran la necesidad de «combatir el descomunal desorden público» en la Serra de Tramuntana, de forma específica en la carretera del Puig Major, donde las denuncias de vecinos, residentes y usuarios sobre este tipo de acciones e incluso carreras ilegales han sido constantes a lo largo de los últimos años, pese al control por parte de las autoridades y la limitación de velocidad en toda la vía a 60 kilómetros por hora de máximo.

Este episodio, en el que la moto protagonista acaba desilzándose sobre el asfalto, y por fortuna a una reducida velocidad al estar ascendiendo y por la elevada pendiente, ha elevado más la temperatura. El piloto de la moto se observa cómo se reincorpora sin aparente dificultad, una vez que la máquina ha impactado contra el vehículo que bajaba desde Monnàber. De inmediato, varias personas presentes en el lugar se apresuraron a recoger la moto, intentar despejar la vía y a atender a la persona acompañante del piloto, que tuvo que ser asistida por los servicios médicos desplazados por ello al lugar con contusiones de diversa consideración. A esa curva también acudió la Guardia Civil para investigar los hechos e intentar identificar a sus protagonistas. Incluso algunas versiones que circularon por las redes referían que el piloto abandonó a su acompañante, dándose a la fuga del lugar del percance.

Durante los fines de semana de manera especial, aunque también el resto de días, el tráfico de motocicletas a elevada velocidad es una constante en la subida al Puig Major, con el Mirador de ses Barques como punto de encuentro de muchos jóvenes. «Esta curva es atravesada por centenares de personas cada día», recuerdan desde 'Indignats Ma-10', toda vez que allí está el mirador, un restaurante y una zona de aparcamiento, además del inicio de algunos tramos de excursiones. «Que haya una tragedia, o más de una, es cuestión de tiempo», refieren en la nota, destacando la actitud del Ajuntament de Sóller a la hora de tratar este delicado asunto.