El tiempo acompañó durante toda la jornada y la noche ha sido muy suave en cuanto a temperaturas. Poco después de las siete, el exterior del Ajuntament ha concentrado a las autoridades asistentesn a la revetla, con la presidenta del Govern, Marga Prohens; el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne; el nuevo delegado de Gobierno, Alfonso Rodríguez Badal o el presidente del Consell, Llorenç Galmés, entre otros consellers y alcaldes de la comarca, acompañaron a la corporación municipal liderada por el alcalde Biel Ferragut. Marga Prohens ha tenido que abandonar la comitiva oficial tras las Completes al sentirse indispuesta.
La iglesia parroquial repleta esperaba el inicio de las Completes y, especialmente, la intervención del Clamater. Para este 2024 la Obreria de Sant Antoni eligió a la Banda i Escola de Música de sa Pobla y uno de sus miembros, Jaume Nicolau, ha sido el encargado de proclamar el «Visca Sant Antoni!» que se recuperó en 2002 y que provoca que la iglesia estalle en aplausos.
La plaza Major ha vuelto a tomar el protagonismo de la velada y, tras la aplaudida actuación de la Escola Festa de sa Ximbomba, arrancaron los bailes de los Dimonis acompañados de las cantadores y de los Caparrots y Caparrots Minyons, al compás de la Banda de Música. Estos han portado crespones negros en honor a Jaume Caldés.
El momento más emotivo de esta Nit Bruixa lo ha propuesto el Piromusical, y por un doble motivo. En primer lugar, el espectáculo musical de este año estaba dedicado a la figura de Jaume Caldés Quetglas, maestro de Caparrots que falleció en 2023. El diseñador pirotécnico, Tomàs Ramis, y el diseñador de la iluminación, Pedro Marcé, guardaron con celo algunas sorpresas que hacían referencia a Caldés y que se han podido adivinar a lo largo del despliegue de fuego, luz y música. Al empezar, se ha iluminado la gran fotografía de Caldés que presidía la fachada del Ajuntament y se ha escuchado su intervención cuando fue Clamater.
Por otra parte, el Piromusical ha celebrado en 2024 su 25 aniversario. Fue el entonces alcalde Jaume Font quien decidió impulsarlo junto al regidor Arnau Rayó, para revitalizar unas fiestas que habían perdido seguimiento. Un cuarto de siglo después se ha convertido en un acto de referencia, aunque a veces se ha discutido su idoniedad en la revetla. El alcalde Biel Ferragut ha reconocido la labor de Tomàs Ramis y le ha hecho entrega de una ximbomba.
Una vez acabado el espectáculo pirotécnico y despejada la plaza Major, la acción se ha centrado en las casas particulares y en los doscientos foguerons repartidos en el municipio. En la plaza de la Església y en la plaza Alexandre Ballester también estaban de celebración, pues el Col·lectiu Sa Negreta organizaba por quinta vez su Fogueró i Glosada Popular. Los 350 tickets que se habían puesto a la venta se encontraban ya agotados y los participantes han podido disfrutar de una torrada de carne o vegana. El objetivo del Col·lectiu Sa Negreta es el de recuperar la fiesta más auténtica, algo que han logrado en las últimas ediciones.
Mientras, la plaza Major reunía a los participantes de la Trobada de Cantadors i Ximbombers, que como no podría ser de otra forma, conmemoraba su 35 aniversario.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.