Ferias de Mallorca: El concurso de caballo de pura raza mallorquina, protagonista de la feria de Sineu

1 de 2 | El concurso morfológico del caballo de pura raza mallorquina llevaba 15 años sin celebrarse, hasta este domingo en la Fira de Sineu. | Lola Olmo

2 de 2 | En la Fira de Sineu la artesanía y el mundo rural tienen un papel protagonista. | Lola Olmo

Lola OlmoSineu05/05/24 13:34

Es imposible resumir la Fira de Sineu en unas pocas frases, pues son tantos los mundos y aficiones que se cruzan este día en la «capital» de la payesía de Mallorca: criadores de aves, de ovejas, de perros de raza o de caballos, por mencionar algunos. Pero sin duda, este año el protagonista ha sido el «cavall mallorquí», porque este domingo se ha recuperado el concurso morfológico de la raza autóctona de caballos de Mallorca, 15 años después de su última edición. Y los propietarios y criadores han respondido, presentando 35 ejemplares cuando en el apogeo de este concurso, hace casi dos décadas, la media estaba en unos 39 caballos concursando.

El Camp d’en Pineta de Sineu ha acogido este concurso con un gran nivel en las características de los caballos presentados, entre ellos los de la sección montada de la Policía Local de Palma, cuyos espectaculares animales son precisamente de raza mallorquina.

Al margen del XIX concurso del Cavall de Pura Raça Mallorquina, esta popular feria llenó Sineu de un gran ambiente alrededor de sus numerosas exposiciones, con el mundo rural como telón de fondo. En Es Fossar se concentraron los corrales de animales y los concursos morfológicos de Oveja Mallorquina, de Oveja Roja mallorquina, de palomas, otras variedades de aves e incluso una demostración de tondre (esquilado de ovejas en vivo). También hubo maquinaria agrícola, exposición de vehículos clásicos y puestos de los distintos productos de las Illes Balears con denominación de origen o Indicación Geográfica protegida.

Los artesanos de Mallorca tuvieron ocasión de mostrar y vender sus productos, desde cestas, paners, forques, cuchillos y herramientas a cerámica, joyas o ropa confeccionada a mano, plantas, miel, bebidas, y todo tipo de productos gourmet y de decoración que muchos aprovecharon para comprar un detalle para el «día de la madre».

Quienes hicieron su agosto y las delicias del público fueron, sin duda, los cellers y restaurantes de Sineu, que ofrecieron no solo su apreciado frit, sino una buena combinación de recetas tradicionales y contemporáneas para todos los gustos.