Caballo en imagen de archivo. | Europa Press

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Asaja Baleares ha solicitado a Emaya la apertura «urgente» de la celda de cadáveres del vertedero de cola de Son Reus para hacer frente, según han dicho, a uno de los «principales problemas» con los que se encuentran los ganaderos de Mallorca que tienen ganado, como es la sepultura de los animales de gran tamaño.

«Desde hace unos años, el sector ganadero de Mallorca tiene un auténtico quebradero de cabeza a la hora de enterrar los cadáveres de vacas, caballos u ovejas y cerdos de gran dimensión, ya que no siempre pueden hacerlo según la legislación vigente», han explicado desde la entidad en un comunicado.

Ante este escenario, han agregado, se presentan dos soluciones. Una es enterrar los cuerpos en la propia explotación, dada la condición de Mallorca de 'zona remota', y otra llevarlos a un lugar autorizado para su depósito.

La primera opción, regulada y sujeta a una serie de límites y condiciones, depende también de otros condicionantes como el tamaño de la explotación y la calidad de los acuíferos existentes en dicha explotación. Así, por ejemplo, si la explotación ganadera está en zonas rocosas o sobre un acuífero declarado contaminado por nitratos, no se permite el enterramiento.

La segunda opción es el traslado y la entrega a la infraestructura habilitada para ello, la celda de cadáveres del vertedero de cola de Son Reus, «una instalación que no está operativa pese a llevar dos años construida».

En este sentido, Asaja ha criticado «la dejadez y poco interés en solucionar un problema sanitario, que se convierte en logístico y económico para los ganaderos». También han indicado que han trasladado esta reclamación tanto a la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural, responsable de la gestión de los asuntos ganaderos, como al Consell de Mallorca, que mediante Tirme se encarga de la gestión de las basuras y residuos en la isla.