El incivismo está al orden del día y no entiende de lugares ni escenarios. Si son constantes las imágenes que vemos en Palma, a muchos kilómetros de la capital también hay vecinos molestos con las actitudes, incluso poco salubres y que atentan contra la higiene pública, incluso de quienes residen o transitan aunque sea temporalmente por zonas turísticas del Llevant de Mallorca.
Es el caso del espacio que comprende una de las más importantes de la Isla, como es la que une Cala Millor, Sa Coma o s'Illot, que comprenden hasta tres municipios: Son Servera, Sant Llorenç des Cardassar y Manacor. En la segunda de ellas, un llamativo cartel reclama a los que pasan por la zona de la calle de la Platja, cerca de la oficina de Correos, que sean un poco más educados.
«No mear aquí, guarros», reza de manera contundente el mensaje que cuelga de la pared junto a un enorme dibujo de un gato, refiriendo los vecinos la presencia allí de un establecimiento dedicado a estos animales, en los bajos de un edificio de la zona. La presencia de indigentes, e incluso de zonas de bares a las que acuden los turistas en temporada alta, sin dejar de lado la de animales, explican la reacción de unos vecinos hartos de los malos olores y la imagen de insalubridad que deben soportar en ocasiones, haciendo saber a quien se atreva a acercarse que están cansados.
Una manera de llamar la atención, consiguiéndolo entre los peatones, que leen sorprendidos el cartel con el llamativo mensaje y una petición con la que solicitan un poco de educación y comprensión ante una situación que ya les ha cansado.
El municipi de sant llorenç ha crescut tant a la costa que no ha estat capaç d'integrar la població de fora. Ara té la costa on cap resident hi vol anar, sobretot Cala Millor s'ha tornat molt hostil pels residents, és hora de tomar hotels que impedeixen la regeneració dunar i convertir aparthotels en vivenda per residents
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El municipi de sant llorenç ha crescut tant a la costa que no ha estat capaç d'integrar la població de fora. Ara té la costa on cap resident hi vol anar, sobretot Cala Millor s'ha tornat molt hostil pels residents, és hora de tomar hotels que impedeixen la regeneració dunar i convertir aparthotels en vivenda per residents