Las calles se inundan con facilidad.

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El alcaltantarillado de la urbanización de Puig de Ros, en Llucmajor, «no da a basto cada vez que llueve con una moderada intensidad». Así lo denuncian los vecinos de la urbanización que sufren las consecuencias de esta insuficiencia con continuas inundaciones tanto en sus domicilios como en las calles del núcleo. Según los vecinos afectados esta situación se ha acentuado en las últimas semanas después de las intensas lluvias, por lo que de forma colectiva han presentado una queja formal al Ajuntament llucmajorer para exigir una solución.

Los vecinos afectados, una veintena, explican que las inundaciones «son debidas a la falta de una red de saneamiento adecuado que provoca que las bocas del alcantarillado se desborden vertiendo aguas pluviales y fecales a la calle, y entrado después en nuestros hogares». Además, aseguran que existen denuncias sobre estos problemas dirigidas al Ajuntament y a la empresa concesionaria del mantenimiento de la red, aunque «no nos han dado ninguna solución».

Los afectados lamentan que sus viviendas «se han convertido en casas prácticamente inhabitables» y advierten que solo entre septiembre y noviembre de este año ya han sufrido hasta cuatro inundaciones graves.