Los concejales de Més per sa Pobla, Biel Payeras, Antoni Simó Tomàs y Catalina Serra.

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Més per sa Pobla celebra que ahora el Govern prohíba la construcción y legalización de viviendas en zonas inundables y otras áreas de riesgo por catástrofes naturales. Sin embargo, el partido critica que «el cambio de postura llegue después de seis meses de una inaceptable permisividad, y solo se ha rectificado como consecuencia de los devastadores efectos de la DANA en Valencia y de la ruptura del pacto con Vox, no por convencimiento».

El municipio no es ajeno a la política del Govern de Prohens. «La cuenca de sa Pobla, que incluye los torrentes de Sant Miquel, de Búger, de Muro y de Siurana, es la zona de Mallorca que mayor caudal de agua aportada recoge; una aportación hidrológica fundamental para los pozos de sa Pobla y para s’Albufera, con lo cual permitir la construcción en esta zona pone en peligro a los habitantes y amenaza los recursos hídricos esenciales para la vida rural y para la biodiversidad», señala el partido pobler.

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En este sentido, Més per sa Pobla exige «la prohibición de construir en suelo rústico, especialmente en zonas de riesgo; y firmeza en la defensa de la legalidad urbanística, con una verdadera política de protección del medio ambiente y de la seguridad ciudadana».

Asimismo, el partido critica que "la permisidad inicial ha generado una grave inseguridad jurídica, con el peligro de que aquellos que han invertido en la construcción ilegal en suelo rústico puedan verse recompensados por sus acciones, mientras que aquellos que han cumplido con la normativa se ven desprotegidos y discriminados".