TW
5

Un caso de presunto maltrato animal y acumulación de residuos ilegales en una finca de Llubí ha desatado una disputa entre vecinos. Según los denunciantes, que prefieren mantenerse en el anonimato por temor a represalias, una treintena de animales vivían hasta hace pocos días en condiciones deplorables, rodeados de basura y en jaulas precarias. También mencionan la presencia de ovejas, cabras, loros y gallinas en similares condiciones.

Los denunciantes acusan al Ajuntament y a la Policía Local de «inacción», alegando que, a pesar de las denuncias presentadas desde el 10 de diciembre, no se han tomado medidas inmediatas para proteger a los animales ni evitar la manipulación de pruebas. De hecho, señalan que el dueño de los animales se «deshizo» de ellos tras ser advertido por un agente de que había sido denunciado, ya que cuando regresaron preocupados por el estado de los animales, ya no los encontraron.

Por su parte, la alcaldesa, Magdalena Perelló, defiende que el Ajuntament actuó dentro de sus competencias, abriendo un expediente por acumulación de residuos e informando al Seprona y la Guardia Civil sobre el presunto maltrato animal, tras enviar a un agente a comprobar los hechos. «Sí, hay muchos animales que están envueltos de basura y dentro de jaulas», confirmó.

Tras las acusaciones, justificó la prudencia municipal, advirtiendo que una actuación del Ajuntament sin base legal podría generarles problemas. Cabe destacar que el conflicto escaló cuando el presunto autor de los maltratos rompió las cámaras de seguridad de la denunciante y la amenazó con quemarle la casa, obligándola a presentar una segunda denuncia. La vecina se encuentra profundamente preocupada.