Sa Cabaneta, compuesto por zonas de nueva urbanización y áreas más antiguas, ha utilizado en gran parte de su casco histórico una red de fibrocemento que data de los años setenta. Las calles principales afectadas incluyen el Camí de n’Olesa, carrer Martí Rubí, carrer Cristòfol Llompart y carrer Jaume I, además de otras calles secundarias que conectan estas vías estructurales. La obra incluye la sustitución de las actuales redes por tuberías de fundición dúctil, que ofrecen mayor resistencia y durabilidad.
En total, se instalarán 3.822 metros de tuberías. Además, se renovarán 395 acometidas domiciliarias, se reconstruirán derivaciones y se instalarán hidrantes contra incendios en tramos donde actualmente no existen. El proyecto contempla la división de la red en dos sectores diferenciados. Estos sectores abastecerán las zonas que no se renuevan mediante válvulas reguladoras de presión o conexiones directas con las redes existentes. Esta estrategia busca optimizar el suministro y minimizar futuras incidencias.
En 2010, el Ajuntament ya llevó a cabo una obra de instalación de una red de recogida de pluviales en parte de las calles Cristòfol Llompart y Jaume I. En aquella ocasión, la empresa concesionaria Aguas Término de Marratxí SA (ATM) renovó las redes de agua potable coincidentes con la traza de la obra municipal. Sin embargo, gran parte de las calles principales, como Olesa y Martí Rubí, aún dependen de tuberías de fibrocemento y acometidas de polietileno, las cuales presentan fugas constantes debido a problemas de instalación y antigüedad.
Las calles afectadas por las obras incluyen Santa Bàrbara, Olesa, Francesc Serra, Arnau Rigo, Miquel Oliver, Son Caulelles, Martí Rubí, Magdalena Solivelles, Cristòfol Llompart, Bel Amengual, Jaume I - Molí, Marquès de la Sènia, Can Domingo y Ses Clotes. El plazo previsto para la ejecución de las obras es de 12 meses, contados a partir de la firma del acta de replanteo. Se espera que las obras comiencen durante 2025, una vez finalizado el proceso de licitación.
4 comentarios
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En otras palabras, van a levantar otra vez casi todas las calles del pueblo (3.822 metros) y los vecinos tendrán las molestias durante meses.
A estas alturas bebiendo agua canalizada por tuberías con Amianto, y casi todas no aptas para el consumo humano. Vaya Fraude.
Pelotasso para la concesionariaaaaa
Enhorabuena al Ayuntamiento. Me encanta ver este tipo de medidas maduras y responsables en beneficio de la salud de nuestros vecinos. A seguir poco a poco por el resto del termino municipal.