Este Ford B de 1932 pertenece a la colección de Gabriel Nicolau, que lo restauró con mucho esfuerzo. | Juan Miguel Giménez

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Gabriel Nicolau es uno de los pocos coleccionistas de la Isla que puede presumir de tener un Ford B y un T, con la particularidad que el T, un modelo de 1922, es un autocar. En cuanto al Ford B, tiene mucha historia. Gabriel nos cuenta que lo encontró hace 30 años abandonado en una cochería de Moscari y le llevó varios años restaurarlo, ya que había mucho trabajo por hacer. Lo terminó poco antes de jubilarse. Era el segundo vehículo que consiguió restaurar. Gabriel, empresario de autocares, entiende bastante de mecánica, aunque no es un mecánico profesional, pero dedicando muchas horas fue poniendo a punto este magnífico Ford B de 1932.

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El modelo B era un automóvil de cuatro cilindros con una versión mejorada del motor utilizado en el modelo Ford A, pero la fábrica Ford comenzó a producir en paralelo un coche muy similar con el nuevo motor Ford V-8. El Ford con motor V-8 se comercializó como el modelo 18, aunque comúnmente se le llamaba Ford V-8 y, a excepción del motor, era prácticamente igual al Ford B. Comenzó a producirse en el año 1932 y se finalizó con su producción en el año 1934, modelo que fue reemplazado por el Ford 48 en el año 1935.